Los neandertales dividían algunas de sus tareas según el sexo.
Un estudio elaborado por el Consejo Superior de Investigaciones (CSIC) de España, publicado en la revista Journal of Human Evolution, analizó 99 dientes incisivos y caninos de 19 individuos de tres yacimientos diferentes (El Sidrón en Asturias, L'Hortus en Francia y Spy en Bélgica). El estudio revela que todos los individuos neandertales, independientemente de la edad, tenían estrías en las piezas dentales asociadas a su modo de vida. "Esto se debe a las costumbres de estas sociedades: usar la boca como una tercera mano en tareas como la preparación de las pieles y el troceado de carne, por ejemplo", explica el investigador del CSIC Antonio Rosas. "Lo que hemos descubierto ahora es que las estrías detectadas en las piezas dentales de las mujeres adultas son más largas que las encontradas en los hombres adultos. Por ese motivo, suponemos que las tareas que realizaban eran diferentes", puntualiza Rosas. Por otra parte, los individuos masculinos presentan mayor cantidad de mellas en el esmalte y la dentina de las piezas superiores, mientras que en los femeninos estas imperfecciones aparecen en las inferiores.
No está claro aún qué actividades correspondían a las mujeres y cuáles a los hombres. Sin embargo, los autores del estudio señalan que, al igual que en las sociedades cazadoras recolectoras modernas, las mujeres podrían haberse encargado de la preparación de las pieles y la elaboración de las vestimentas. El retoque de los filos de las herramientas de piedra parece haber sido una tarea masculina.
Los neandertales (Homo neanderthalensis) son una especie humana extinta que vivió hace entre 300.000 y 28.000 años. Tenían hombros anchos, clavículas largas, gran caja torácica, pecho en forma de barril y extremidades cortas. Diferentes investigaciones sugieren que enterraban a sus muertos y cuidaban a sus enfermos. Ahora, las estrías dentarias sugieren que machos y hembras realizaban diferentes tareas.
Fuente: Edición impresa Muy Interesante
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21/7/15
12:27 p.m.
16/7/15
12:04 p.m.
LA DENTADURA IRROMPIBLE DE LAS LAPAS COSTERAS
Descubren un material en la naturaleza tan resistente como el kevlar.
La seda de araña es considera el material natural más fuerte de nuestro planeta: su resistencia a la tracción es de 1.3 gigapascales (Gpa). Sin embargo, investigadores de la Universidad de Portsmouth, en Inglaterra, descubrieron otro material biológico que le disputa el título. Son los minúsculos dientes de las lapas (familia Patellidae), los moluscos comestibles que viven adheridos a las rocas de las costas. Los anclajes que utilizan las lapas están compuestos por goethita (un cristal que contiene hierro) y nanofibras minerales, que les proveen una resistencia a la tracción nada menos que de entre 3 y 6,5 Gpa.
Las lapas utilizan sus dientes para raspar alimento de la piedra. Esta tracción constante deterioraría a la mayoría de los materiales naturales, pero las lapas pueden hacerlo porque sus dientes son tan fuertes que se podrían comparar con las aleaciones creadas por el hombre, como el kevlar o las fibras de carbono de la más alta calidad. Los integrantes del equipo de la Universidad de Portsmouth esperan que este descubrimiento tenga aplicaciones prácticas en diferentes campos, como la odontología (implantes) o como protección.
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La seda de araña es considera el material natural más fuerte de nuestro planeta: su resistencia a la tracción es de 1.3 gigapascales (Gpa). Sin embargo, investigadores de la Universidad de Portsmouth, en Inglaterra, descubrieron otro material biológico que le disputa el título. Son los minúsculos dientes de las lapas (familia Patellidae), los moluscos comestibles que viven adheridos a las rocas de las costas. Los anclajes que utilizan las lapas están compuestos por goethita (un cristal que contiene hierro) y nanofibras minerales, que les proveen una resistencia a la tracción nada menos que de entre 3 y 6,5 Gpa.
Las lapas utilizan sus dientes para raspar alimento de la piedra. Esta tracción constante deterioraría a la mayoría de los materiales naturales, pero las lapas pueden hacerlo porque sus dientes son tan fuertes que se podrían comparar con las aleaciones creadas por el hombre, como el kevlar o las fibras de carbono de la más alta calidad. Los integrantes del equipo de la Universidad de Portsmouth esperan que este descubrimiento tenga aplicaciones prácticas en diferentes campos, como la odontología (implantes) o como protección.
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6/7/15
2:25 p.m.
EL MAR MUERTO MARCIANO
El hemisferio norte de Marte habría albergado un extenso océano.
Hace tiempo que se ha confirmado la presencia de agua congelada en los polos de Marte y también se ha especulado con el pasado del Planeta Rojo y la presencia de un vasto océano. Ahora, sin embargo, ese cálculo ya no es una incógnita. Hace 4.300 millones de años, una superficie de agua mayor al de nuestro océano Ártico cubrió las llanuras hundidas del hemisferio norte del vecino planeta. No era muy profundo, apenas un promedio de 137 metros y 1,6 km en algunas depresiones mayores.
"Nuestro estudio aporta un estimado sólido de la cantidad de agua que Marte tuvo alguna vez, determinando la cantidad de agua que se perdió en el espacio", explica en un comunicado de la NASA Gerónimo Villanueva, un ingeniero argentino que trabaja en el Centro Goddard de Vuelo Espacial en Maryland, en los EE.UU. Gracias a las mediciones realizadas con los observatorios infrarrojos más potentes del mundo, incluido el VLT del Observatorio Europeo Austral en Chile, el equipo liderado por Villanueva logró identificar señales químicas de dos tipos de moléculas de agua: la H2O que conocemos y la HDO, una versión más pesada del hidrógeno, el deuterio. Mientras que HDO queda atrapado en la atmósfera de Marte y se acumula en forma de hielo en los polos, el H2O tiende a escapar al espacio.
Al comparar la proporción de H2O que aún queda en Marte con la proporción de H2O en un meteorito marciano datado en 4.500 millones de años, el equipo logró determinar la cantidad que desapareció. "Marte fue húmedo durante unos 1.500 millones de años, mucho más tiempo del que fue necesario para que surgiera vida en la Tierra" aclara Villanueva. Los resultados del trabajo, que fue publicado en la revista Science, sugieren que el Planeta Rojo perdió el 87 por ciento de su masa de agua.
Fuente: Edicion impresa Muy Interesante
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