Mucho antes de que se levantaran las pirámides egipcias diferentes civilizaciones construyeron edificaciones cuyo origen es tan antiguo como inexplicable.
CARNAC
Los 3.000 megalitos verticales alineados y anclados en la tierra de lo que hoy es el norte de Carnac, en Francia, componen el conjunto más grande en Europa. Entre esas rocas, el único grupo que se ha podido fechar es el túmulo Saint Michel, construido alrededor del año 5000 a. C. Según el arqueólogo escocés Alexander Thom (1894.1985), fue un sitio de observación astronómica donde se estudiaban las puestas y salidas de la Luna, del Sol y de las estrellas. Tiempo después los romanos dibujaron a sus deidades en algunas piezas y los cristianos colocaron cruces en la zona.
STONEHENGE
Está ubicado en Wiltshire, Inglaterra, y formado por bloques de más de 50 toneladas que provienen (algunos de ellos) de canteras en Gales, a más de 380 km. Fue construido entre 3000 y 2500 a. C. Un equipo conjunto de la Universidad de Birmingham y el Instituto austriaco Ludwig Boltzmann encontraron recientemente 17 nuevos monumentos enterrados en un área de 12 Km².
KERCADO
Al túmulo de Kercado, ubicado en la región de Bretaña. en Francia, se lo considera el sitio megalítico más antiguo de Europa. Se calcula que fue construido entre 5700 y 4000 a. C. Lo conforman una tumba cubierta por un montículo de piedras y tierra de 40 m de diámetro, rodeada por 27 pequeños menhires (rocas individuales erigidas verticalmente) con una puerta formada por tres grandes bloques. La construcción apunta hacia los alineamientos de Carnac, ubicados a dos kilómetros hacia el sur: se cree que fue un lugar de sepultura para los jefes de las tribus locales.
GGANTIJA
Los 7 templos megalíticos de las islas Malta y Gozo fueron construidos entre los años 4000 y 2500 a. C. en distintas fases, aunque se estima que los habitantes llegaron a ese lugar desde el año 5000 a.C. La Unesco declaró Patrimonio de la Humanidad en 1980 a Ggantija y en 1992 a los restantes. Lo poco que se sabe de los constructores es que se dedicaban a la agricultura y a la crianza de ganado y que formaron parte de una civilización que tal vez migró de Sicilia, Italia.
CARROWMORE
Es el cementerio más antiguo de Irlanda y el segundo más grande en Europa. Sus piezas están datadas entre 5400 y 4370 a. C. Era un conjunto de 80 monumentos formados por un círculo de 35 piedras y un dolmen (una roca sostenida por otras rocas) central. En el interior de cada tumba se han encontrado más de 30 kilos de cenizas de cuerpos humanos mezclados con huesos de animales. La necrópolis cubre un terreno de 2,5 Km², pero la explotación de canteras ha destruido gran parte del predio; hoy es posible apreciar 27 monumentos.
GÖBEKLI TEPE
A pesar de que los megalitos más antiguos no tienen signos de haber sido labrados, los del templo Göbekli Tepe, en el sureste de Turquía, son la excepción. El arqueólogo Klaus Schmidt, del Instituto Alemán de Arqueología, asegura que las rocas fueron cimentadas hace 11.000 años. Está compuesto por dos monolitos centrales con figuras talladas (jabalíes, escorpiones, leones) rodeados por un muro circular y pilares en forma de T. Hay vestigios de otros 16 megalitos enterrados y es considerado por algunos cientificos como el centro sagrado más viejo del mundo.
Fuente: Edición impresa Muy Interesante
COMPARTE CON TUS AMIGOS
14/5/15
1:32 p.m.
6/5/15
10:37 a.m.
LAS MISTERIOSAS LUCES DE CERES
La sonda Dawn ingresó en la órbita del planeta enano.
La Unión Astronómica Internacional (UAI), que reúne a todos los astrónomos profesionales del mundo, redefinió el concepto de planeta en 2006. Desde entonces, un cuerpo celeste podría pertenecer al exclusivo club si reúne ciertas condiciones: orbitar alrededor de una estrella; tener una forma esférica, debido al equilibrio entre su gravedad y la presión interna, y haber limpiado su órbita de otros elementos. En aquel momento, esta definición relegó a Plutón al grupo de los planetas enanos y puso en el mapa de nuestro sistema solar a un vecino olvidado: Ceres, el mayor de los asteroides del cinturón que se ubica entre Marte y Júpiter. Se trata de un terreno espacial anárquico, donde millones de rocas alternan su trayectoria colisionando unas con otras. Ese el hogar de Ceres y, al mismo tiempo, el objetivo de la misión Dawn (Amanecer, en inglés) de la NASA: sortear el cinturón para cartografiar a Ceres y comprender las condiciones y los procesos en la formación de nuestro Sistema Solar. Después de viajar en silencio durante 7 años gracias a un novedoso sistema de propulsión de iones, la sonda Dawn logró ingresar en la órbita de Ceres en marzo pasado.
Este enigmático mundo fue descubierto en 1801 por el astrónomo italiano Giusepe Piazzi y bautizado en honor a la diosa romana de la agricultura y la maternidad. Tiene 1.000 km de diámetro y una tenue atmósfera, posee un manto grueso de hielo y se sospecha que podría esconder un océano de agua líquida bajo su helada corteza. Esto llevó a diferentes equipos de astrónomos a considerarlo un buen candidato para crear y albergar vida.
Gracias al Telescopio Espacial Hubble se conocía una extraña fuente de luz sobre la superficie del planeta enano. Aquellas imágenes fueron tomadas desde una distancia superior a 290 millones de kilómetros y la mancha luminosa parecía ser de grandes proporciones. Sin embargo, la cámara de la sonda Dawn comenzó a revelar algo diferente. "Se puede observar que la mancha luminosa de Ceres tiene una compañera de menor luminosidad. Esto puede indicar que las manchas tienen un origen similar al de los volcanes, pero aún tenemos que esperar a contar con una mejor resolución antes de poder hacer tales interpretaciones geológicas", destacó Chris Russell, investigador principal de la misión Dawn, con sede en la Universidad de California, en los EE.UU.
Fuente: Edición impresa Muy Interesante
COMPARTE CON TUS AMIGOS
Fuente: Edición impresa Muy Interesante
COMPARTE CON TUS AMIGOS
Suscribirse a:
Entradas (Atom)